jueves, 13 de noviembre de 2008
Nueva misión, nueva ciudad, nueva vida
martes, 24 de junio de 2008
Diálogo Argentino
Diálogo Argentino
A través de las palabras
Por medio de las palabras
Encontraremos la verdad
Y la verdad nos hará libres
Para ello hacen falta cuatro cosas
Respeto al dialogante como persona
Sinceridad de corazón
Transparencia y humildad[1]
Entonces tu verdad y la mía
Ya no serán dos sino una, y nueva
Captación de la realidad
Mucho mejor que la mía y la tuya
Cuanta falta nos hace dialogar
Con respeto, sinceridad
Transparencia y humildad
Para encontrar la luz argentinos
Ojalá podamos deponer todo
Para encontrarnos dialogando
Sinceramente y sin trampas
Para levantar las cabezas
Caminar bien erguidos y enriquecidos
Queriéndonos como hermanos
Amigos y compañeros de camino
Y dejar tras nosotros un mundo mejor
Donde cada gaucho tenga
Hogar, escuela, iglesia,
Familia, futuro y amor…
Dignidad para todos[2]
Entonces la azul y blanca
Flameará hermosa
Y las generaciones sonreirán al viento
en una nueva libertad.
San Martín, Belgrano,
Berón de Astrada
Y el Sargento Cabral
Nos ayudarán de arriba.
lunes, 23 de junio de 2008
Fotos para compartir
EL DIALOGO ES FUNDAMENTAL PARA LA ARGENTINA DE HOY
Homilía de monseñor Miguel Esteban Hesayne, obispo emérito de Viedma para el tercer domingo de Pascua (6 de abril de 2008)
En estas cuatro últimas semanas la palabra que se ha pronunciado en forma insistente es la palabra DIALOGO. Y con razón. Solamente mediante el diálogo nos humanizamos y se puede convivir en Paz. A la luz de la Fe Cristiana sabemos que estamos creados a imagen y semejanza de Dios cuya constitución más íntima es el Diálogo amoroso de Tres Personas Divinas. Entonces el diálogo humano no es un simple discurso. Tiene su fundamento en la misma condición del ser humano.
La primera condición requerida para que se logre el “diálogo” es que se realice entre personas que se respetan la una y la otra como tal. Es obvio pero, en la práctica, no siempre suficientemente se cumple este primer e indispensable requerimiento. En consecuencia no hablemos de Diálogo si los que lo intentan no aspiran a personalizarse mutuamente.
Uno y otro de los interlocutores deben aspirar a ser más y ayudarse, por medio del diálogo, para la realización de este objetivo. Quiere decir que ninguna de las partes debe ser considerada como un objeto. Y la responsabilidad de la frustración de Diálogo cae sobre quien no aspira a la mutua personalización.
Una segunda condición que se desprende de la primera enunciada, es la búsqueda de la verdad de la existencia humana propia y ajena con sinceridad de corazón. Esta actitud de búsqueda de la verdad… es una actitud de apertura-escucha para ir descubriéndola en el pensamiento expuesto por la otra parte.
La misma palabra diálogo, encierra esta actitud de búsqueda de la verdad escuchando al interlocutor. Palabra de origen griego compuesta de la expresión “dia” que en griego significa “a través” y la expresión “logo” que significa “palabra”. Cuando alguien quiere dialogar -de verdad- tiene que estar convencido que no está en posesión de la verdad total. A lo sumo lleva una parte que debe completar con su interlocutor.
Por eso, se requiere una tercera condición: la “transparencia” de persona a persona. Exige –escribe Paulo VI– “un intercambio de pensamiento, es una invitación al ejercicio de las facultades superiores del hombre”. No hay rodeos y lo que se piensa se expresa sin repliegues o subterfugios. La persona transparente muestra el fondo de su corazón como aguas límpidas dejan ver el fondo, por profundo que fuere… Una persona así, es rectilínea, no busca por medios subterráneos la conquista de un objetivo también subterráneo. Con la persona recta es posible el diálogo. Con la persona doble el diálogo queda roto. Por eso, Jesús en su Evangelio nos pide en el trato de unos con otros el: Sí-Sí, el No-No y es tan severo con los hipócritas hasta el punto de llamarlos sepulcros blanqueados que muestran limpidez por fuera y podredumbre por dentro.
Y una cuarta condición se impone: la humildad. La persona orgullosa es la más cerrada al diálogo. El autosuficiente es radicalmente incapaz de dialogar. Encerrado en el sobre valor de sí mismo pretende tener la verdad absoluta.
El corazón orgulloso está cerrado al mismo Dios ¿cómo podrá abrirse a otra persona? Por eso, se piensa -a la luz de la Fe Cristiana- que el pecado de la primera pareja (pecado originante) fue pecado de orgullo que originó al “hombre roto” en su triple relación con Dios, con los demás y con la naturaleza.
En clave cristiana sabemos que Dios se metió en el mundo de los hombres (Navidad) para que la humanidad logre la Reconciliación (Pascua). Porque si se pretende una sociedad sin Dios se podrán lograr grandes progresos materiales que a su vez serán causa de divisiones, desencuentros y desigualdades. Los hombres sin Dios jamás se entienden (Torre de Babel).
Pero, tampoco se entiende a Dios cuando se reza para imponer la “propia verdad”, en vez de buscar la intervención de Dios para lograr la capacidad de auténtico Diálogo, único camino de la Paz social de la Nación… Salmo 44 (43),4
Mons. Miguel Esteban Hesayne, obispo emérito de Viedma(mehm@speedy.com.ar)
lunes, 9 de junio de 2008
COMPARTO CON USTEDES ALGUNOS SUSPIROS
PATRIA MIA: Salvador Veron
Patria mía porque sufrimos tanto y nos cuesta tanto ser libres
Patria mía porque siempre andamos a los saltos y a los tumbos
Patria mía porque no nos terminamos de querer entre hermanos
Patria mía porque siempre nos enredamos y nos revolcamos.
Tiempos de paro y de piquetes
Tiempos de fondear nuestros valores
Tiempos de llamado a la reflexión y la grandeza
Tiempos bellos para salir adelante o al menos de intentarlo.
Tenemos ríos, montañas, mares, y la pampa inmensa
Tenemos gente inteligente, capaz, bella y buena
Tenemos oro, petróleo, peces, vacas y trigo
Tenemos casi todas las razas y culturas.
Qué nos pasa entonces a los argentinos
Qué nos frena para ser una gran nación
Qué nos pasa para salir adelante
Qué nos impide volar y superarnos.
Nos falta releer nuestra historia y aprender de los errores
Nos falta recuperar la cultura del trabajo y de la solidaridad
Nos falta ser más honestos, sinceros, amigables y justos
Nos falta tener ganas de despegar entre todos.
Patria mía que te pasa que no salís de tu auto boicoteo
Patria mía que te pasa que no salís de tu comportamiento autodestructivo
Patria mía que te pasa que no terminas de sacudir tus lastres antiguos
Patria mía que te pasa que vivís revolcándote en tus repeticiones inútiles
Si no reconocemos que nos hemos equivocados muchas veces
Si no aprendemos de tantas metidas de pata no saldremos adelante
Si no nos dejamos ayudar por los que la pegaron es una pena
Si no intentamos nuevos caminos de reconciliación personal y colectiva estamos fritos.
Necesitamos ensayar una creatividad nueva y una valentía renovada
Necesitamos encontrar nuevos senderos de esperanzas
Necesitamos recuperar los valores como la grandeza, magnanimidad, equidad
Necesitamos volver a empezar con mucha fe, con mucha humildad y mucho amor.
Y tal vez volvamos a volar como los cóndores
Y liberarnos como nuestros próceres
Y recuperar la alegría, los sueños, las nostalgias y la belleza
Y de vivir en una PATRIA GRANDE, LIBRE, JUSTA, BELLA Y FELIZZZZZ
PATRIA MIA LEVANTATE Y LEVANTANOS A TODOS LOS ARGENTINOS
PATRIA MIA RECUERDANOS NUESTRAS COSAS BUENAS
PATRIA MIA EXIGENOS A VOLVER A TENER PALABRA, HONOR Y JUSTICIA
PATRIA MIA DEMANDANOS Y CON DIOS SACANOS ADELANTE…
GLOBALIZAR LA SOLIDARIDAD
Aqui va unos tramos del texto.....
globalizar la solidaridad, Benedicto XVI: El desafío actual,
CIUDAD DEL VATICANO, domingo, 8 junio 2008 (ZENIT.org).- Publicamos el discurso que dirigió Benedicto XVI a la fundación "Centesimus Annus, pro Pontifice" al recibir en audiencia a sus representantes el 31 de mayo de 2008.
* * *
Un desarrollo armonioso es posible si las opciones económicas y políticas realizadas tienen en cuenta los principios fundamentales que lo hacen accesible a todos: me refiero, en particular, a los principios de subsidiariedad y solidaridad. En el centro de toda programación económica, considerando especialmente la vasta y compleja red de relaciones que caracteriza la época posmoderna, debe estar siempre la persona, creada a imagen de Dios y querida por él para custodiar y administrar los inmensos recursos de la creación. Sólo una cultura común de la participación responsable y activa puede permitir a todo ser humano sentirse no usuario o testigo pasivo, sino colaborador activo en el proceso de desarrollo mundial.
El hombre, al que Dios en el Génesis confía la tierra, tiene la tarea de hacer fructificar todos los bienes terrenos, comprometiéndose a usarlos para satisfacer las múltiples necesidades de cada uno de los miembros de la familia humana. En efecto, una de las metáforas recurrentes en el Evangelio es precisamente la del administrador. Por tanto, con la actitud de un administrador fiel el hombre debe gestionar los recursos que Dios le ha confiado, poniéndolos a disposición de todos. En otras palabras, es preciso evitar que el beneficio sea solamente individual, o que formas de colectivismo opriman la libertad personal.
El interés económico y comercial no debe convertirse nunca en algo exclusivo, porque de hecho mortificaría la dignidad humana. Puesto que el actual proceso de globalización que está atravesando el mundo afecta cada vez más a los campos de la cultura, la economía, las finanzas y la política, hoy el gran desafío es "globalizar" no sólo los intereses económicos y comerciales, sino también las expectativas de solidaridad, respetando y valorando la aportación de todos los componentes de la sociedad.
Como habéis reafirmado oportunamente, el crecimiento económico no debe separarse jamás de la búsqueda de un desarrollo humano y social integral. A este respecto,
Queridos amigos, a la vez que os renuevo mi gratitud por el generoso apoyo que dais incansablemente a las actividades de caridad y de promoción humana de
Que
viernes, 6 de junio de 2008
Nuestros Pastores nos llaman a la grandeza, al diálogo y a la cordura
Aqui les comparto algo para orar y reflexionar...
AICA - BAIRES – Servicio Nacional - Jueves 5 de junio de 2008
Documento del Episcopado:
Con el título “
“Es preciso -dice un párrafo del documento- que tomemos conciencia de que situaciones como ésta que vivimos nos menoscaban como comunidad, nos aíslan del mundo y en definitiva perjudican especialmente a los más pobres. Es más, este conflicto ha puesto de manifiesto falencias profundas de nuestra vida republicana. La persistencia misma del conflicto y la aparente imposibilidad de resolverlo constituyen un signo de debilidad institucional; son una prueba del escaso aprecio que, como sociedad, otorgamos a la importancia y dignidad de la acción política como el ámbito propio para la superación de las diferencias y el afianzamiento de la amistad social”.
En la conferencia de prensa en la que se leyó el comunicado, el periodismo preguntó si
El texto del documento es el siguiente:
1.
Nos sentimos obligados a preguntarnos nuevamente, y con dolor: ¿nuestras relaciones seguirán marcadas por la confrontación? ¿Una vez más nuestra vida social estará signada por la fragmentación y el enfrentamiento? ¿Seremos incapaces de fundamentar nuestros vínculos en un diálogo sincero y constructivo? ¿No hemos aprendido nada de nuestra historia?
2. Es preciso que tomemos conciencia de que situaciones como ésta que vivimos nos menoscaban como comunidad, nos aíslan del mundo y en definitiva perjudican especialmente a los más pobres. Es más, este conflicto ha puesto de manifiesto falencias profundas de nuestra vida republicana. La persistencia misma del conflicto y la aparente imposibilidad de resolverlo constituyen un signo de debilidad institucional; son una prueba del escaso aprecio que, como sociedad, otorgamos a la importancia y dignidad de la acción política como el ámbito propio para la superación de las diferencias y el afianzamiento de la amistad social.
3. Consideramos que la solución sólo puede encaminarse mediante gestos de grandeza y una vigencia aún más plena de las instituciones de
No es propio de los poderes públicos empeñarse como parte en los conflictos, sino abocarse a su solución como principales responsables del bien común de acuerdo a las funciones que a cada uno de ellos les atribuye
4. Como nos recuerda
5. Por otra parte, aunque hubieran reclamos justos, no es en las calles ni en las rutas donde solucionaremos nuestros problemas. Pedimos, por ello, encarecidamente al Gobierno de
6. Es necesario que los habitantes de esta tierra bendecida abundantemente por
7. En los momentos difíciles los cristianos experimentamos más intensamente la necesidad de la oración, de decirle a Jesucristo, Señor de
Exhortamos a nuestros compatriotas a acompañar la oración con un gesto de desprendimiento en favor de nuestros hermanos más necesitados.
Ponemos este mensaje en las manos y en el corazón de nuestra Madre de Luján, pidiéndole que una vez más interceda por nosotros y acompañe el camino de las autoridades, de los dirigentes de los diversos sectores y de todo el pueblo argentino.
Reunión Extraordinaria de
5 de junio de 2008
jueves, 5 de junio de 2008
Arroz con Pollo el 25 de Mayo, Viva la Patria
El 25 de Mayo pasado nos largamos con un arroz con pollo... salio rico... y tb una buena colaboracion para conseguir un cañon-proyector para el uso de la pastoral de Nazareno...
Estamos en vista del siguiente para Julio...preparen las cucharas... y cucharones...
Gracias a todos los colaboradores, especialmente a los jóvenes que tuvieron la iniciativa y pusieron los hombros. Y a todos los bienechores, donativos, y compradores.... que el Señor les conserve su generosidad y solidaridad....
miércoles, 4 de junio de 2008
Mes de Belgrano, Puente General Belgrano, Corrientes Junio 2008
Caía la neblina fina en mi ciudad querida, y con ella toda la bruma del otoño se desperezaba. Cuantas lluvias habrán caído desde mi estadía en este rincón del nordeste. Cuantas nubes habrán pasado por el cruce desde que lo construyeron. Cuanta agua habrá pasado por debajo y cuántos autos la habrán hermoseado.
Hojas de otoño, nostalgias del verano, brisa helada y bufandas en flor. Todo esto está de moda en este tiempo tan hermoso para algunos y tan tristes para otros. Se van apagando los carritos cerveceros, de las hamburguesas, y las cenas rápidas, todos acariciados por la bruma oscura del Paraná, señor de los ríos.
Está de moda los piquetes, contra piquetes y repiquetes. Nada se desperdicia en tiempo de hambre, de injusticia, de desencuentro y de incierto futuro. Todo el mundo manotea de donde puede. Unos de la soja, otros de la carne, de las rutas, del PJ, de las retenciones, de las marchas, y en realidad tamos todos a contramarcha. Tenemos comida para trescientos millones y los treinta que somos nos encargamos de boicotearnos. Somos unos genios.
La niña bonita del festín del desencuentro nacional, y regional es el pasadizo ese que todos lo quieren y lo usan. Todos se acuerdan de él cuando hace falta. Y todos somos dueño de él pero a la vez ninguno. Porque cuando alguien enojado y reclamando se enoja se nos adueña, no pasamos nadie. Y pucha que se hace difícil la cosa. De ambos lados hay problema de todo tipo. Ya murieron unos cuantos ahí, esos que los llaman motoqueros, y otros. Está de moda morir en moto últimamente.
El otro día se encadenaron todos los encargados de cuidarnos. Y del otro lado estaban los que también tienen que cuidarnos pero con ordenes de desalojo. Se desalojan mutuamente los que nos tienen que cuidar. Y para qué los queremos si ellos son más peligrosos que los que andan por ahí amigos de lo ajeno.
Porqué será que cuando construimos cosas que nos unen nos encargamos de desunirnos. Cuando vamos a aprender que nos conviene andar apuntando todos para el mismo lado. Para ver si salimos de una vez de esta sentada que hace ya algún tiempo nos tiene de paro. Pero no de paro del campo, de paro como pueblo, como nación.
Cae la neblina sobre mi ciudad querida y el otoño como pueblo nos quiere manotear hacia los remolino de no se qué abismo. Ojala pase pronto el otoño, con sus hojas caídas, y más rápido el invierno con su tornillo de frío y soledad. Y vuelva rápido la primavera de la amistad social, del progreso y de la felicidad. Entonces nuestro puente volverá a lucir el azul y blanco de Belgrano, al fin de cuenta. Puente Belgrano creo que le llaman. Ojala sea en este mes de Belgrano pué, si pué. Sino se va a levantar de su tumba a darnos un sapucay.
Salvador Veron
martes, 27 de mayo de 2008
Algunas poesias para compartir
Escuchando viejas melodías
Estabamos oyendo viejas melodias
y el otoño se recostaba en el horizonte
tus ojos traían recuerdos de antaño
se agolpaban tenues imágenes en el corazón
el bandoneón iba hilvanando
notas alegres que te desperezaba
una suave caricia al alma me embolvía entera
era tu presencia serena amigo mío
todos los ritmos se hicieron presente
melódicos, suaves, fuertes, estridentes
era una mesa exquisita de belleza y placer
y soñabamos como hacía rato no lo hacíamos
Entre como nunca en mis zótanos invisibles
donde se amacan aquellas fantasías
que sólo tu conoces, cuando y donde
no te olvides nunca pequeña flor de almendro
Salva/Sabri/Olgi, 7-5-8
lunes, 26 de mayo de 2008
LECTURAS RECOMENDADAS DE NUESTRA REALIDAD
Salta, 25 May. 08 (AICA) El arzobispo de Salta, monseñor Mario Cargnello, convocó hoy a todos los argentinos a “apostemos con audacia creativa y confianza renovada a la amistad social y al diálogo como camino para construir la comunidad nacional”, y a consolidar el espíritu fraterno que “compromete a recrear los vínculos entre todos los habitantes de esta tierra y nos ilumina para mirar al otro como hermano. Nunca unos contra otros”, porque el diálogo, insistió, es “un instrumento eficaz para convertir la crisis en oportunidad”.
Durante el Tedéum en la catedral de Salta y ante la presencia de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y su gabinete, el prelado también rogó a
Al finalizar la homilía, el padre Adolfo Barrionuevo, Iglesia Ortodoxa; pastor Hugo Vergara, Iglesia Anglicana; pastor David Thies, Iglesia Luterana; rabino Marcelo Wajcer, comunidad judía, y presbítero Pablo Martínez, Iglesia Católica, hicieron cada uno desde su fe una oración a la patria. Tras el rezo del Padrenuestro, la interpretación del Gloria, de Vivaldi, monseñor Cargnello impartió la bendición a las autoridades presentes, mientras
Texto de la homilía
Como una respuesta brotada desde lo profundo del corazón a
Se trata de un recuerdo cargado de gratitud y de responsabilidad. De gratitud por la rica herencia que nos legaron los mayores a lo largo de estas casi veinte décadas; de responsabilidad porque el presente nos exige actuar de tal manera que, aprendiendo de los aciertos y errores del pasado enmendemos estos y profundicemos aquellos para poder pergeñar un futuro que ofrezca horizontes a las generaciones que nos han de suceder.
En el horizonte de nuestras vidas de argentinos ya despunta la celebración de las fiestas del Bicentenario; acercándonos a ellas, nos sentimos felices porque, desde esta Provincia podemos decir, con humilde convicción, algunos pensamientos que surgen de cara a un nuevo siglo de vida argentina.
Esta casa guarda la imagen bendita del Señor del Milagro, imagen que viene animando la oración por la patria rezada por tantos argentinos desde hace ya casi siete años. Aquí se nos ofrece un clima familiar en el que quisiera testimoniar una herencia y dirigir un pedido a todos mis hermanos argentinos.
La herencia la recojo de la historia de nuestra provincia. Salta quedó marcada por su amor a la patria desde los inicios de ésta. Baste recordar lo decisivo de aquella batalla conducida por el General Manuel Belgrano el 20 de febrero de 1813 en la consolidación de nuestra independencia. Este pueblo ha madurado en cada generación su conciencia de civilidad alimentado por muchos testimonios de servicio, de desinterés, de proyección. Creo no equivocarme si destaco, espigando en su historia, tres datos que están grabados en el alma de esta provincia y que son: el mensaje del Milagro, el legado de Güemes y el servicio de Facundo de Zuviría.
El Mensaje del Milagro: La historia de Salta se acuna en él. Desde la fundación de esta ciudad en 1.582, primero fue promesa, luego encuentro, después olvido, luego una historia de comunión profunda que culmina en 1.844 cuando el Pueblo hace un pacto con el Señor. Desde entonces el pueblo lo renueva cada año en una primavera pascual.
La profunda experiencia del encuentro con Cristo es para cada salteño y para el pueblo, una experiencia de dignidad que se afirma y de libertad que se recrea. Como el Pueblo de Israel reconoce en el Pacto del Sinaí el nacimiento de su condición de pueblo libre, así el pueblo de Salta, al reconocer que sólo Dios es su Señor, se sabe un pueblo libre y por ello un pueblo digno. Es que la dimensión religiosa de la persona es la base de su dignidad y la custodia de su libertad. Nunca Argentina tuvo miedo a Dios, fuente de toda razón y justicia y, en esta hora es muy bueno que nos presentemos ante El para alabarlo. “Señor, Dios eterno, alegres te cantamos, a ti nuestra alabanza, a ti, Padre del cielo, te aclama la creación. Postrados ante ti los ángeles te adoran y cantan sin cesar: Santo, santo, santo, Dios del universo; llenos están los cielos y la tierra de tu gloria”.
El legado de Güemes. La figura del General Martín Miguel de Güemes es para los salteños un llamado a la entrega por la patria en la fortaleza hasta el heroísmo. Es digno de destacar cómo su acción de defensa de la patria fue acordada con San Martín y Belgrano en un plan estratégico al que fue fiel hasta la muerte porque la patria se lo pedía. Este profundo amor a la tierra que nos vio nacer constituye un aporte al modo de ser del hombre del interior. Hay un estilo generoso, cordial, respetuoso, digno, acogedor, fiel a la palabra dada, que se resume en la palabra gaucho y que cualifica al hombre y a la mujer del interior argentino. Estos valores, que están en la base de la cultura nacional profunda llaman a que los tengamos en cuenta a la hora de pensar nuestra identidad.
El servicio de Facundo de Zuviría. A este ilustre salteño le correspondió presidir el Congreso Constituyente de 1.853 que consagró nuestra Constitución Nacional dando origen al estado organizado que consolidó el crecimiento y la evolución de
Esta herencia que es viva en el corazón del pueblo, me impulsa a pedirles a todos los argentinos tres compromisos, que los obispos miembros de
1.- Trabajemos por continuar construyendo
2.- Renovemos nuestro esfuerzo por consolidar el sistema democrático desde el respeto a la constitución y a las instituciones de la patria. Cuando el respeto a la ley constituye un bien adquirido cada ciudadano puede sentirse libre y proyectarse dignamente. Lo contrario pone a la nación en un camino involutivo hacia la ley de la selva. ¿Será capaz nuestra generación de avanzar desde la “viveza criolla” hacia la nobleza que compromete? Es preciso continuar trabajando para elevar la calidad de la educación basándola en los inclaudicables valores puestos por Dios en el corazón del hombre. Animémonos a crecer en la honestidad, en la austeridad, en la responsabilidad por el bien común, en la solidaridad y en el espíritu de sacrificio, en la cultura de la familia, de la vida y del trabajo.
3.- Apostemos con audacia creativa y confianza renovada a la amistad social y al diálogo como camino para construir la comunidad nacional. El espíritu amplio e incluyente que caracteriza a nuestra patria se plasmó entre otras expresiones en la voluntad de promulgar nuestra constitución para “nosotros, para nuestra posteridad y para todos los hombres del mundo que quieran habitar el suelo argentino”. Ese espíritu fraterno hoy nos compromete a recrear los vínculos entre todos los habitantes de esta tierra y nos ilumina para mirar al otro como hermano. Nunca unos contra otros. El diálogo es un instrumento eficaz para convertir la crisis en oportunidad. La fatiga que acompaña su ejercicio no es infecunda ni irrelevante; sabernos encontrar, escuchar y hablar hasta ponernos en el lugar del otro es garantía para avanzar socialmente. Reafirmemos nuestra convicción de que “una sociedad no crece necesariamente cuando lo hace su economía, sino sobre todo cuando madura en su capacidad de diálogo y en su habilidad para gestar consensos que se traduzcan en políticas de estado que orienten hacia un proyecto común de Nación”. Avancemos en la construcción de una Patria de hermanos. No neguemos a nuestros niños y a nuestros jóvenes esta señal de esperanza.
Hemos escuchado a Jesús en el Evangelio ofrecerse como Pan vivo bajado del cielo. Hoy
Tedeum, 25 de mayo de 2008
Iglesia de Nuestra Señora de
Ciudad de Corrientes
Mons. Andrés Stanovnik
“Cristo es nuestra paz: él ha unido a los dos pueblos en uno solo…” Efesios 2, 14-18
1. La bella imagen de
I. Un tiempo de renovación
2. Hacemos también una agradecida memoria de los Padres de
3. Así como nadie puede darse la vida a sí mismo, tampoco puede renovarla sólo por sí mismo. La auténtica renovación de espíritus es un don de Dios y queremos pedirla con insistencia y humildad por nuestros gobernantes y por todo nuestro pueblo, suplicando hoy la poderosa intercesión de Nuestra Señora de
II. Signos fundacionales portadores de valores
4. Este nuevo aniversario de nuestra Patria nos invita a recordar nuestro origen. Allí, como sucede en todo inicio de la vida, se encuentran embrionariamente aquellos elementos fundamentales que luego conforman la identidad y la misión de un pueblo y son fuente permanente de renovación espiritual. Dios, que nos ama inmensamente, nos regaló en los orígenes de nuestra Provincia dos signos que condensan significados de enorme riqueza para una multitud de correntinos y correntinas:
5. En
6. Ante la imagen de Nuestra Señora de
III. El camino del diálogo fraterno y democrático
7. Hay una profunda coincidencia entre los dos signos:
8. En cambio, cuando se pierde de vista el ideal del amor hasta el extremo, que está a la base de una auténtica amistad social, las relaciones personales e institucionales se deterioran gravemente. El resultado es inevitable: esas relaciones empiezan a nivelarse por lo bajo. Esa tendencia, de no revertirse, termina inexorablemente en bajeza y degradación. El desleal juego de desgastar al adversario, la práctica inmoral del doble discurso y el necio recurso a la descalificación, abren la puerta al pasillo oscuro de la sospecha, de la desconfianza, de la defensa y del ataque. Cuando se acaba el diálogo surge la agresión. La violencia engendra violencia. Tenemos que entender que no hay diferencia sustancial entre la violencia del palo y la capucha con la del casco y el fusil. Ambas entran en una espiral de violencia, que nunca condujo a nada bueno para nadie, pero trajo, en cambio, mucho sufrimiento y degradación humana para todos.
9. Cuando surgen problemas en la familia, en una institución o en la comunidad política, no se resuelven mediante convocatorias ocasionales al diálogo. Debemos convencernos de que el diálogo exige una profunda renovación de espíritus, que crea en las personas una disposición permanente al encuentro y genera estructuras que lo facilitan. Esa renovación debe contener, como condición indispensable, la confianza entre los interlocutores, la transparencia de sus intenciones y el deseo sincero del bien común para todos; sabiendo que el valor del bien común está siempre por encima de los intereses particulares. Naturalmente, si se aseguran estas condiciones, hay que añadir una alta cuota de humildad, de renuncia y de sacrificio, virtudes sociales que, lamentablemente, no cultivamos con demasiado entusiasmo. Sin embargo, estamos a tiempo para ser razonables y para responder a la estatura espiritual de la mayoría de nuestra gente, que aspira a un trabajo digno con un salario equitativo y justo; que anhela ejercer el derecho de participar responsablemente en la gestión del bien común; que reconoce agradecida el progreso y afianzamiento democrático, convencidos de que es el mejor camino para seguir construyendo una nación justa, fraterna y pacífica.
10. Una comunidad empieza a resolver sus problemas cuando se hace cargo de ellos, los reconoce y es capaz de ponerles nombre. Es decir, cuando se sincera consigo misma y se anima a decir la verdad. Como el adicto, por ejemplo, que inicia su proceso de curación sólo cuando es capaz de reconocer cuál es su verdadero problema. Mientras no lo haga, dará vueltas sobre sí mismo hundiéndose en sus propias contradicciones y creando en torno a sí un sin fin de innecesarias complicaciones y dificultades, para desgracia de sí mismo y de los demás. Hoy tenemos que mirar nuestros problemas como Provincia y como Nación, ponerles nombre, no tenerles miedo y buscar pacientemente el mejor camino para resolverlos por los caminos del diálogo fraterno y democrático.
11. La profunda fe en Dios y en
12. Somos conscientes de nuestra fragilidad y también de nuestro pecado. Pero, al mismo tiempo, sentimos que el amor de Dios nos levanta y nos anima en la esperanza. Por eso, los invito a rezar, sintiéndonos unidos todos los argentinos y argentinas de buena voluntad,
Jesucristo, Señor de la historia, te necesitamos.
Nos sentimos heridos y agobiados.
Precisamos tu alivio y fortaleza.
Queremos ser nación,
una nación cuya identidad sea la pasión por la verdad
y el compromiso por el bien común.
Danos la valentía de la libertad de los hijos de Dios
para amar a todos sin excluir a nadie,
privilegiando a los pobres y perdonando a los que nos ofenden,
aborreciendo el odio y construyendo la paz.
Concédenos la sabiduría del diálogo
y la alegría de la esperanza que no defrauda.
Tú nos convocas. Aquí estamos, Señor,
cercanos a María, que desde Luján nos dice:
¡Argentina! ¡Canta y camina!
Jesucristo, Señor de la historia, te necesitamos. Amén.